Don Juan Tenorio

Autor: José Zorrilla y Moral

Fecha publicación: 1844

Género: Drama Romántico

Don Juan Tenorio es una obra teatral perteneciente a José Zorrilla y Moral, uno de los pocos autores de su época que gozó de fama en vida. Quédate con nosotros y sorpréndete, en este clásico de la literatura española, cómo la salvación espiritual se logra gracias al amor.

Resumen y sinopsis

La historia de Don Juan Tenorio se divide en dos partes de cuatro y tres actos respectivamente. Presenta a Don Juan, personaje que realiza una apuesta con don Luis Mejía que consiste en duelos y seducción de mujeres. El ganador es Tenorio quien asegura que conquistará a una novicia y a la novia de su retador.

Don Juan Tenorio logra cumplir sus objetivos. Pero sucede que se enamora de la ingenua novicia. Don Gonzalo, el padre de la muchacha, y don Luis encaran al seductor, sin embargo, terminan muertos. Don Juan huye y abandona a doña Inés que muere de pena.

A su regreso, don Juan encuentra que su casa es un panteón en donde están todas sus víctimas. Luego de una invitación a cenar, se arrepiente, pide perdón y su alma es salvada por doña Inés. Este desenlace postula que el amor es el sentimiento que da sentido a la vida.

Resumen de Don Juan Tenorio

Lo primero que debes conocer es que este drama es uno de los principales pilares del mito del donjuán, el personaje más universal del teatro español. Es una obra constantemente representada.

Rompe con la tradicional regla de las tres unidades, así abre paso a la reflexión en donde la primera parte desarrolla una aventura amorosa y la segunda, el espíritu religioso. El nombre del protagonista ha pasado al léxico como un nombre común. Esta es una característica de las grandes obras literarias.

Primera parte

Primer acto

Es carnaval y se celebra la fiesta. Don Juan está hospedado y le pide a su criado que le lleve un recado a doña Inés. Después, el comendador Don Gonzalo, padre de doña Inés, ingresa, usa un antifaz y ocupa una mesa para presenciar el encuentro que sostendrán don Juan y don Luis. Se dice a sí mismo que de ser cierta la apuesta, no dejará que su hija se case con Tenorio.

Luego entra, enmascarado, Don Diego, padre de don Juan, y se sienta a una mesa. Sostiene que quiere ver si es verdad lo que se dice de su hijo. Entonces, entra don Juan, y luego, don Luis. Se presentan, se quitan los antifaces y recuerdan que el motivo del encuentro es la apuesta. Comienzan a leer y a contar el número de fechorías que cada uno cometió.

Gana don Juan. No obstante, don Luis Mejía le indica que aún le falta una novicia. Tenorio le responde que conquistará a la novicia y a doña Ana, la novia de su rival. Antes de que se vaya, don Gonzalo le dice que no permitirá que su hija se case. En ese instante, don Diego se levanta, y avergonzado de su hijo, abandona el lugar en compañía del comendador.

Segundo acto

Don Luis Mejía llama a la ventana de su novia y le advierte del peligro que corre. Don Juan y su criado también llegan a la casa de doña Ana. Se ocultan y Tenorio explica a su sirviente que el plan es que éste capture a Mejía. Efectivamente, es apresado y encerrado.

Más adelante, aparece Brígida, la criada de doña Inés, que había acordado con Tenorio facilitar la conquista de su señora. La mujer le dice que ya le comunicó que él es el hombre elegido para casarse con ella y que está muerto de amor. Después, Tenorio se dirige a la casa de los Pantoja y a cambio de oro acuerda con una de las criadas de doña Ana que lo deje entrar durante la noche.

Tercer acto

Doña Inés lee una carta en donde Tenorio le confiesa su amor. Después se impresiona al ver a don Juan y se desmaya. Es sacada del convento. Llega don Gonzalo y solicita hablar con la abadesa quien ordena que vayan a buscar a doña Inés, pero le informan que no está y que un hombre ha sido visto por la huerta. El padre corre tras ellos.

Cuarto acto

Doña Inés es llevada a la casa de don Juan. Cuando despierta, su sirvienta le dice que Tenorio la rescató de un incendio. Doña Inés se preocupa porque no puede estar en la casa de un hombre de mala fama. Intenta huir, pero se encuentra con don Juan. Una vez que la joven se ha tranquilizado, este le declara su amor y ella le confiesa que también lo ama.

Llega don Luis que viene a matarlo porque deshonró a doña Ana; sin embargo, cuando se disponen a luchar, un criado le advierte a Tenorio que viene el comendador con hombres armados.

Entra don Gonzalo, dispuesto a vengar el honor de su hija. Don Juan se arrodilla, le suplica perdón y el consentimiento para casarse con doña Inés. Pero don Gonzalo le responde que nunca lo permitirá. Don Juan, viendo que quieren matarlo, decide enfrentarlos. Primero mata al comendador de un disparo y luego a don Luis de una estocada. Finalmente, huye.

Segunda parte

Primer acto 

Don Juan llega a la que fue su casa y se entera que ahora es un panteón por la voluntad de su dueño quien quiso que ahí se enterraran a todos los que mató su hijo. Luego, reconoce las estatuas del comendador y la de don Luis Mejía. Se fija en la estatua de doña Inés, que murió de pena cuando regresó al convento, y llora a sus pies.

Aparece la sombra de doña Inés y le dice a Tenorio que Dios, al ver cómo lo amaba, le concedió unir sus almas. Si se arrepiente y actúa bien se podrán salvar, pero si actúa mal causará la desgracia de ambos porque esa noche se termina su tiempo.

Don Juan está desconcertado, por eso, al ver a Centellas y a Avellaneda, piensa que son espectros. Después, Tenorio les menciona que cenarán en su casa y también invita a la estatua del comendador.

Segundo acto

En la casa de don Juan Tenorio están listos para cenar. En la mesa hay un sitio reservado para el comendador. Así, mientras brindan, llaman a la puerta insistentemente. Luego, la estatua del comendador pasa a través de la puerta. Centellas y Avellaneda se desmayan.

El comendador le dice a don Juan que no tiene que asustarse ya que él lo ha invitado. Le indica que viene en nombre de Dios para informarle que va a morir y que tiene la noche para arrepentirse y salvarse. Agrega que espera que le devuelva la visita.

Don Juan, todavía impresionado, recibe la aparición de doña Inés. Ella le dice que tenga valor para acudir a la cita porque solo tiene esa noche para arrepentirse.

Tenorio, aturdido, piensa que todo ha sido preparado por sus amigos para hacerle una broma. Ellos, por su parte, creen que es don Juan quien lo ha hecho para hacer alarde de su valor. Empiezan a discutir y salen de la casa con ánimos de luchar.

Tercer acto

Don Juan llega al panteón para acudir a la cita. Entonces, la sepultura del comendador se transforma en una mesa con un plato de ceniza, una copa de fuego y un reloj de arena.

El comendador le dice que la ceniza es en lo que se convertirá, el fuego es el que hay en el infierno a donde irá y el reloj mide el tiempo que le queda. Además, le recuerda que aproveche el tiempo para salvar su alma. Sin embargo, don Juan no cree posible arrepentirse y borrar tantos años de mala vida.

Luego, ven pasar una comitiva rumbo a un entierro y el espectro le menciona que es el suyo, ya que el capitán Centellas lo mató. Cuando se le acaba el tiempo, Tenorio se arrepiente de sus pecados y, de rodillas mirando al cielo, pide piedad. Finalmente, aparece doña Inés y le menciona que ella dio su alma por él y gracias a ello obtuvo el perdón divino.

Análisis de Don Juan Tenorio

El personaje de Don Juan asume un predomino y así los demás contrastan con su intensa personalidad. Don Juan Tenorio presume su intrepidez y la publicidad de sus conquistas. Dado su carácter dista de representar el arquetipo del héroe clásico ya que no ejecuta ninguna hazaña guerrera, es mentiroso y antepone la mujer a la espada.

Esta obra teatral está llena de motivos románticos de principio a fin. En una simple enumeración podemos citar los elementos carnavalescos, las apuestas sobre burlas amorosas, la estatua animada, la visión de su propio entierro y el arrepentimiento final.

Simboliza la rebeldía social. Sin dejar de ser quien es, se enamora y este amor es lo que le salva del infierno. Te invitamos a descubrir la razón de que el mito del donjuán sea fuente de inspiración en la literatura universal.

Frases

“Sospecho que esta noche ha de consumar el hecho”.

“Con oro nada falla”.

“Yo creo que él es un diablo en carne mortal”.

“La broma me es pesada”.

“Mi alma he dado por ti”.