Yerma

Autor: Federico García Lorca

Fecha publicación: 1934

Género: Teatro / Tragedia

Yerma es una obra teatral que le pertenece a Federico García Lorca. Presenta las costumbres y los designios de una sociedad que limita a la mujer a mantenerse en el quehacer doméstico. Quédate con nosotros y descubre la historia de Yerma cuyo nombre hace referencia a la tierra no cultivada.

Resumen y sinopsis

La historia de Yerma va más allá del deseo de convertirse en madre y, en parte, se transforma en obsesión. La protagonista lleva años casada con Juan y no puede quedarse embarazada. Esta situación oprime su corazón, acción que queda en evidencia cuando su amiga, que lleva menos tiempo de matrimonio, ya está esperando un hijo.

También se evidencia el deseo de Yerma cuando, al encontrarse con Víctor, cree escuchar el llanto de un niño. Al final, Juan le llega a explicar que su felicidad se encuentra lejos de la idea de tener hijos. Es por esto que Yerma lo mata ya que se ve imposibilitada de cumplir su meta, una aspiración en donde la honra es muy importante.

Resumen de Yerma

La obra presenta tres actos en donde el escenario rural evidencia puntos de referencias para la historia. Yerma lleva en su condición la infertilidad enlazada con la pasión. Incluso, se describe a sí misma como marchita, una flor que muere por falta de agua. La obra postula una crítica a los mandatos sociales y cuestiona los roles establecidos.

Primer acto

Yerma se muestra triste porque después de años de matrimonio no está embarazada. Juan, su marido, considera que tener hijos es una preocupación. Le ordena a Yerma que no salga de la casa porque eso le disgusta. Llega su amiga María y le dice que está embarazada con solo algunos meses de matrimonio.

La protagonista se consterna porque lo que más anhela es tener un hijo. Se pone a coser para el bebé, llega Víctor y la felicita porque piensa que ella es la embarazada. Tras esclarecer la situación, le sugiere que le diga a Juan que no piense tanto en el trabajo. Una vez que Yerma se queda sola, mientras cose, se pone a cantar con la mirada perdida.

Pasa mucho tiempo. Yerma aparece después de llevar la comida a Juan. Está de regreso del campo y se encuentra con una vieja a quien le consulta la razón de que no tenga hijos. La interrogada le pregunta si ha sentido un temblor con Juan. Le contesta que eso solo le ha pasado con Víctor. La vieja, entonces, sostiene que tal vez esa sea la razón, pero después le pide paciencia.

Aparecen dos mujeres. La primera le comenta a Yerma que ha dejado solo a su hijo, a lo que le responde que tenga mucho cuidado. La segunda menciona que prefiere no tener hijos porque no le gustan los deberes de esposa. Después, Yerma oye a Víctor que está cantando. Ella lo felicita por su voz y se produce un silencio incómodo para ambos.

Se escucha el llanto de un niño que solo Yerma percibe. Llega Juan y Víctor se retira. El marido le recrimina que no haya regresado rápidamente a la casa. Agrega que se retire a dormir porque él se quedará en el campo.

Segundo acto

Unas lavanderas comentan que Yerma engaña a su esposo, aunque lo único que se sabe es que se la vio hablando con un hombre. También mencionan que han llegado las hermanas de Juan para vigilar a su esposa.

Juan llega a su casa e interroga a sus hermanas por el paradero de Yerma. Ella regresa con agua. La pareja se pone a discutir. Han pasado años y Juan piensa que su esposa debería contentarse con todo lo que le da y por eso no debería deshonrar a la familia saliendo a cada rato. La esposa le pide silencio porque él no comprende que las mujeres deben tener y cuidar a los hijos.

Llega María con su hijo y Yerma le dice que ya está harta porque en el campo todos tienen frutos menos ella. Su amiga no consigue consolarla y se retira. Aparece una muchacha y le menciona que la solicita su madre. Entra Víctor para despedirse y Juan decide acompañarlo hasta cierto punto. Después, Yerma y la muchacha se van sigilosamente.

Tercer acto

Yerma está en la casa de Dolores, la conjuradora. Han ido a un cementerio para hacer un conjuro de embarazo. En plena oración se lamenta de que su esposo se muestre frío. Él es su única oportunidad de quedar embarazada ya que no mancharía su honra. En eso, llegan Juan y sus hermanas. El esposo la acusa de adulterio y de que su conducta propicia los comentarios de la gente.

Más adelante, en los alrededores de una ermita, ocurre un ritual de romería. En este lugar acuden las mujeres casadas que no pueden concebir. Yerma se encuentra ahí. Aparece una vieja y le propone escaparse con su hijo, pero no acepta porque debe conservar su honra.

La vieja se enfada y la maldice. Juan le cuenta a su esposa que ha escuchado la conversación y le expresa que la vida sin hijos es lo mejor y por eso no piensa ser padre. Yerma le pregunta qué es lo que busca en ella y él le dice que a ella misma. Intenta abrazarla y besarla, pero Yerma grita y lo estrangula. Finalmente, exclama que ha matado a su hijo.

Análisis de Yerma

La honra es muy importante porque es la guía para poder comprender a los personajes. La preservación de la misma es la base de la reputación, una realidad que a Yerma la lleva a cuidar su honor y respetar su matrimonio.

Dentro de esta sociedad conservadora, las mujeres permanecen en el ámbito privado y los hombres cuidan la propiedad fuera de sus hogares. Los comentarios destruyen la honra familiar, aunque Yerma no hace nada indebido y solo sigue sus sueños.

Frases

“No lo dice, pero sus ojos tiemblan”.

“Las muchachas en el campo tienen cerradas las puertas”.

“Lo mira fijamente y desvía la mirada como si tuviera miedo”.

“Mi vida está en el campo, pero mi honra es también tuya”.

“Una cosa es querer y otra es que el cuerpo no responda”.